Alabáis como os han enseñado,los que han alabado.
Pero las cosas cambian y ustedes lo saben.
Han alabado bien, porque el corazón late sin parar,así pues, debe de ser la alabanza ,de continuó,como lo ha hecho nuestros antepasados.
Expresando el sentimiento positivo, porque el alma es agradecido con su señor y celebra las bondades de su Majestad el eterno Dios.
En la congregación tenemos por costumbre celebrar la presencia del altísimo, cantando,alardeando nuestra alabanza de gratitud.
Desde luego que alabar es intenso y gratificante para el siervo que alardea (halel)(lehalel).
Un creyente manifiesta el aprecio hacia Dios, admirándolo como el alga y omega, principio y fin,de todo.
Tú también puedes venir a casa de Dios y orar con nosotros,te esperamos.
